
La Cámara de Diputados aprobó por amplia mayoría un conjunto de iniciativas impulsadas por la oposición para mejorar los haberes jubilatorios. El proyecto establece un aumento del 7,2% en los haberes, eleva el bono complementario de 70 mil a 110 mil pesos y extiende por dos años la moratoria previsional. Pese al aval legislativo, el Gobierno ya anticipó que vetará la ley por considerar que compromete el equilibrio fiscal.
La propuesta fue aprobada en general con 142 votos a favor, 67 en contra y 19 abstenciones, provenientes de sectores de la UCR y el PRO. Apoyaron la iniciativa Unión por la Patria (UxP), Encuentro Federal, la Coalición Cívica, el Movimiento Popular Neuquino, la izquierda, y bloques provinciales como Por Santa Cruz y Producción y Trabajo, entre otros.
En tanto, se opusieron La Libertad Avanza, los sectores del PRO referenciados en Patricia Bullrich, radicales de la Liga del Interior y bloques aliados al oficialismo como Somos Fueguinos y Creo.
La votación de la extensión de la moratoria previsional fue más ajustada: 111 votos positivos, 100 negativos y 15 abstenciones. Esta medida fue respaldada por UxP, la izquierda, Producción y Trabajo, y algunos legisladores de Encuentro Federal. Fue rechazada por el oficialismo, el PRO, la UCR y la mayoría de Encuentro Federal.
El dictamen de mayoría establece que el 7,2% se incorporará al haber mensual y servirá de base para futuros aumentos. Además, se ratificó el decreto presidencial 274/2024, que determina la actualización de haberes de acuerdo con el índice de inflación.
A propuesta del diputado Nicolás Massot (Encuentro Federal), se incorporaron artículos para financiar las mejoras previsionales. Se incluyen medidas como la eliminación de exenciones del IVA a directores de empresas, el impuesto a las sociedades de garantía recíproca, la readecuación de partidas de inteligencia, y el uso de recursos provenientes de la baja de tasas del FMI y registros automotores.
Uno de los puntos destacados del proyecto refiere a las cajas previsionales provinciales. La iniciativa dispone que la ANSES transfiera antes del día 20 de cada mes un anticipo mensual a las provincias que no traspasaron sus cajas a la Nación.
Durante el debate, la diputada Victoria Tolosa Paz (UxP) argumentó que el aumento busca compensar la pérdida del poder adquisitivo provocada por la devaluación y la inflación de enero de 2024, que el DNU 274 no contempló completamente.
Por su parte, Carlos Heller, vicepresidente de la Comisión de Presupuesto, defendió la iniciativa: “Nos dicen que son parches, pero los parches sirven para evitar que el problema se agrave”.
Desde el oficialismo, el diputado Álvaro Martínez (LLA) criticó duramente el proyecto y lo calificó como una “estafa a los jubilados”, asegurando que “sin financiamiento, no hay justicia social”. A su vez, Lisandro Nieri (UCR) advirtió sobre la volatilidad de los ingresos jubilatorios y propuso una actualización sustentada en el superávit fiscal.
El presidente de la Coalición Cívica, Juan Manuel López, sostuvo que no acompañarán una nueva moratoria, pero apoyaron la suba de haberes: “No queremos que la crueldad se apodere del programa de estabilización económica”.
Desde el Ejecutivo nacional, se adelantó que las iniciativas serían vetadas, argumentando un impacto fiscal estimado en 12 mil millones de dólares, equivalente al 1,8% del PBI.