
Daniela Barrios, de Corrientes, y Gastón Díaz, de Lanús, fueron seleccionados entre casi 11.000 postulaciones de 148 países como finalistas del Global Student Prize 2025, un prestigioso premio internacional que reconoce con 100.000 dólares a estudiantes destacados por su rendimiento académico, compromiso social e innovación.
Daniela, de 17 años, cursa el último año de la secundaria en el Instituto Adventista de Corrientes. Logró que su escuela participara por primera vez en la Olimpíada Nacional de Matemáticas —donde ganó medalla de bronce—, fundó un club de ajedrez, gestionó pasantías universitarias para sus compañeros y participa en múltiples iniciativas solidarias y ambientales. Además, desarrolló un prototipo de anteojos inteligentes que utilizan inteligencia artificial y realidad aumentada para ayudar a personas sordas, proyecto que ya fue reconocido a nivel internacional y busca financiamiento para concretarse.
Gastón, también de 17 años y alumno del Instituto Santa Faz de Lanús, fundó una app de marketing digital reconocida por Microsoft for Startups, coescribió una ley de alfabetización financiera y tecnológica juvenil que ya se aplica en más de 70 ciudades, y obtuvo el cuarto lugar en un desafío global del MIT Solve. Actualmente participa en el Campamento Nacional de Ciencias en Estados Unidos, organizado por el Departamento de Estado. Además, lidera hackatones, da clases de apoyo a niños en situación de vulnerabilidad y diseña soluciones tecnológicas con impacto social.
Tanto Daniela como Gastón fueron incluidos entre los 50 finalistas del Global Student Prize, organizado por Chegg.org y la Fundación Varkey, la misma institución detrás del Global Teacher Prize. El objetivo es destacar a estudiantes de al menos 16 años que impulsen cambios positivos en sus comunidades y demuestren liderazgo, resiliencia y vocación transformadora.
El anuncio de los 10 finalistas está previsto para agosto, y el ganador será elegido por la Academia del Global Student Prize, integrada por referentes educativos de todo el mundo. En 2024, la ganadora fue Ángela Elena Olazarán Laureano, una joven mexicana, mientras que la argentina Martina Bahiana Basgall Sequeira fue finalista.
“Cuando me contaron la noticia, fue una gran emoción: me largué a llorar”, contó Daniela, que recientemente participó en la Academia de Innovación Cívica de Georgetown, en EE.UU., gracias a una beca. “Estoy convencida de que la educación es la herramienta más importante que tengo en mi vida”, afirmó.
Gastón también expresó su entusiasmo por haber sido elegido: “Creo que me eligieron porque me involucro en muchos espacios distintos: desde dar desayunos a niños vulnerables hasta programar o hablar con legisladores. Me interesa aprender y generar impacto”, explicó.
Ambos tienen aspiraciones universitarias en campos como economía, finanzas, computación y negocios, y coinciden en que el reconocimiento es solo un paso más en su deseo de transformar la realidad que los rodea. “El mejor consejo que puedo darles a otros jóvenes es que no se queden con el ‘qué hubiera pasado si…’. Todos podemos lograr cosas importantes si salimos de nuestra zona de confort”, concluyó Daniela.