07/09/2025 - Edición Nº179

Internacionales

Futuro del empleo y tecnología

La inteligencia artificial reconfigura el mercado laboral, pero no todo está en riesgo

05/09/2025 | Los analistas coinciden en que los trabajos frente a la pantalla son los más expuestos a la automatización, aunque destacan que la creatividad, la empatía y las tareas prácticas siguen siendo un valor humano difícil de reemplazar.



El avance de la inteligencia artificial (IA) está transformando de manera acelerada el mercado laboral y genera incertidumbre, especialmente entre los jóvenes que buscan su primer empleo. Según datos recientes de Indeed, las ofertas de trabajo en Estados Unidos cayeron un 6,7% en el último año, con mayor impacto en los puestos de entrada.

La experiencia de Olivia Fair, una graduada que ha enviado más de cien solicitudes sin éxito, refleja la nueva realidad: tareas como la transcripción de entrevistas, antes realizadas por equipos completos, ahora dependen de sistemas automatizados supervisados por una sola persona.

Los especialistas coinciden en que la IA afecta sobre todo a funciones que se realizan frente a una pantalla, como redacción, traducción, soporte técnico o diseño gráfico. En contraste, se observa mayor resistencia en actividades que demandan contacto humano, creatividad o habilidades físicas, como la salud, la educación, la construcción y los oficios.

Aunque crecen los temores sobre una pérdida masiva de empleos, economistas como David Otter (MIT) consideran que las predicciones más alarmistas carecen de fundamento. El verdadero desafío, advierten, es que la automatización elimine tareas de apoyo que sirven como entrenamiento para los principiantes.

El análisis de Indeed identificó que cerca del 30% de las habilidades laborales actuales podrían ser ejecutadas, al menos parcialmente, por IA. Sin embargo, un 70% permanece fuera de riesgo en el estado actual de la tecnología.

Los expertos remarcan que, al igual que ocurrió con revoluciones tecnológicas pasadas, surgirán nuevas oportunidades en campos aún difíciles de prever. “Habrá trabajos que hoy ni siquiera imaginamos”, concluyó Otter.