01/11/2025 - Edición Nº234

Internacionales

Río de Janeiro en shock

Brasil: vecinos hallaron más de 50 cuerpos tras la megaoperación policial

29/10/2025 | Los cadáveres fueron trasladados por los propios residentes a una plaza del Complexo da Penha. Se trata de la operación más letal en la historia del estado de Río de Janeiro.



El hallazgo de más de 50 cuerpos en la zona norte de Río de Janeiro desató una ola de conmoción y denuncias por violaciones a los derechos humanos. Los cadáveres, encontrados en un área boscosa entre los complejos del Alemão y de la Penha, fueron trasladados por los propios vecinos hasta la plaza São Lucas, donde los dispusieron en el suelo para exigir respuestas.

La escena, que recuerda a imágenes de guerra, se produjo tras la operación policial más letal de la historia del estado, que dejó oficialmente 64 muertos —entre ellos cuatro agentes— y 81 detenidos. Sin embargo, los residentes aseguran que el número de víctimas podría superar las 120.

Flávia Fróes, abogada presente durante la remoción, denunció que muchos cuerpos presentaban “disparos en la nuca, puñaladas y signos de tortura”. “Esto fue una masacre”, sostuvo.

Organizaciones sociales y defensores de derechos humanos reclamaron la intervención de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y la llegada de peritos internacionales para investigar lo ocurrido.

Raull Santiago, activista del Complexo do Alemão, explicó que los cuerpos fueron exhibidos públicamente a pedido de los familiares, como forma de visibilizar la brutalidad de la operación. “Fue una escena que quedará en la historia del terror brasileño”, aseguró.

Mientras tanto, el gobierno de Río de Janeiro aún no emitió un comunicado oficial sobre el hallazgo.

Durante la noche posterior a la operación, las calles de la ciudad quedaron vacías. Bares y restaurantes cerraron por temor, y los barrios que suelen ser centro de la vida nocturna carioca mostraron un silencio inusual. “Parece una ciudad en pandemia”, dijo un vecino de Tijuca.

El miedo y la incertidumbre dominan a Río de Janeiro, mientras los familiares de las víctimas siguen esperando una respuesta.